Título: Helen no puede dormir
Autor: Marian Keyes
Editorial: Plaza & Janés
Año: 2013
ISBN: 9788401354199
Nº de páginas: 528
SINOPSIS: Lee la sinopsis de este libro pinchando AQUÍ
Marian Keyes es, dentro del chick lit, una autora de referencia y como es un género que a mí me gusta mucho, hace unos años había leído algún libro suyo con buenos resultados, por lo que ya tenía ganas de hacerme con alguno de los títulos que aún tengo pendientes. A pesar de que no había leído todos los anteriores, me anime con Helen no puede dormir, publicado este año y protagonizado por la menor de las hermanas Walsh.
En este caso y como nos indica su título, la novela está protagonizada por Helen, la menor de las hijas de la familia Walsh, quien trabaja como investigadora privada en la ciudad de Dublín. Debido a la crisis económica sus clientes han descendido lo que provoca que no pueda hacer frente a los pagos de su hipoteca y tenga que instalarse de nuevo en casa de sus padres. La aparición de su ex novio Jay Parker, quien le encargará investigar la extraña desaparición de Wayne Diffney, miembro de uno de los grupos pop más conocidos de Irlanda en los años noventa, supondrá una motivación para Helen y hará que se esfuerce por escapar de la depresión que amenaza con derrumbar nuevamente su vida.
Helen no puede dormir ha sido para mí un libro que ha ido de más a menos. El principio me gustó y me pareció original introducir una investigación dentro del argumento, es algo que hasta ahora no había encontrado en un libro de este género y por eso me pareció diferente. Sin embargo a medida que pasaba páginas me daba la sensación de que la historia giraba una y otra vez sobre lo mismo, por lo que aunque ha sido una lectura entretenida, no es un libro que haya disfrutado totalmente.
La trama se desarrolla a lo largo de siete días, correspondiendo cada día a una de las partes en las que se divide la novela más una final que se sitúa seis meses más tarde. A su vez cada una de estas partes está subdividida en diversos capítulos en los que se recoge todo lo que sucede cada uno de esos días. Todos ellos están narrados en primera persona desde el punto de vista de Helen y es así como vamos siguiendo los pasos que ella da tanto en su vida personal como profesional.
El libro está narrado con un estilo fresco y desenfadado, empleando la autora un lenguaje directo y claro que hace que se lea con facilidad y agilidad. Es una lectura amena pero en general tiene un tono más serio que el que suele caracterizar a este tipo de libros en los que aunque se recojan situaciones con mayor o menor carga dramática, siempre van acompañadas de ciertas dosis de humor.
Helen es un personaje cuya personalidad viene marcada por sus problemas de salud mental. Este es uno de los puntos importantes que tiene la novela y a través de ella nos acercamos a la situación en la que se encuentran las personas que atraviesan por estados depresivos, observando la lucha que mantiene constantemente para salir adelante. Es un tema que está tratado con realismo, sin restarle importancia a través del humor a pesar de que Helen, por su carácter, sea una mujer un tanto alocada. Comparte con el lector sus pensamientos y emociones al narrar en primera persona y así nos permite ver cómo se siente, lo que pasa por su mente en cada momento y los esfuerzos que hace para no dejarse vencer por la depresión. Si bien la conocemos en un punto concreto de su vida, paulatinamente y a través de sus propios recuerdos sobre momentos de su pasado vamos viendo lo que ha ocurrido durante los últimos años y así se va construyendo su carácter, observando la evolución que ha seguido a lo largo del tiempo. Es un personaje que me ha gustado, no pierde su sentido del humor y tiene una personalidad carismática que la hace destacar.
El resto de personajes no están demasiado desarrollados y solamente los que tienen un contacto más directo y cercano con Helen adquieren mayor protagonismo, destacando así su exnovio o su actual pareja, aunque la mayoría vienen definidos por unas personalidades un poco extravagantes que dan pie a situaciones un tanto cómicas e inusuales. Aparecen también puntualmente algunas de sus hermanas o su madre, a quienes los lectores que hayan leído sus anteriores novelas ya conocerán, aunque la autora se encarga de dar algunos datos para aquellos que tienen su primer contacto con la familia Walsh a través de esta novela.
Os comentaba que la trama de Helen no puede dormir se asienta en buena parte en la investigación de una desaparición y por eso desde el principio se genera un cierto misterio e incertidumbre por desvelar el paradero de Wayne. Sin embargo no es una investigación al estilo policíaco sino que en este caso es todo mucho más sencillo y al menos para mí, Helen se limita a dar vueltas sobre lo mismo por lo que llega un punto en el que al no avanzar nada, este tema se estanca y la historia pierde interés, de ahí que os dijese que iba de más a menos. Esto puede ser debido a que el enfoque que Marian Keyes le ha dado a su novela se basa en el personaje de Helen y de ahí que su trabajo quede en un segundo plano y la investigación se desarrolle lentamente, con escasas pistas y giros argumentales. No obstante he de señalar que a mí me mantuvo intrigada hasta el final, no había deducido qué podía haber ocurrido con Wayne.
Resumiendo, a pesar de que Marian Keyes es una autora vinculada al chick lit, en este caso nos presenta una obra que se aleja un tanto de lo que es habitual en este género combinando el suspense que envuelve a la investigación con la situación personal de su protagonista. Una novela que aborda el tema de la depresión y cuya lectura resulta entretenida, recomendable para todo tipo de lectores por la combinación de elementos que encontramos en su trama.
En este caso y como nos indica su título, la novela está protagonizada por Helen, la menor de las hijas de la familia Walsh, quien trabaja como investigadora privada en la ciudad de Dublín. Debido a la crisis económica sus clientes han descendido lo que provoca que no pueda hacer frente a los pagos de su hipoteca y tenga que instalarse de nuevo en casa de sus padres. La aparición de su ex novio Jay Parker, quien le encargará investigar la extraña desaparición de Wayne Diffney, miembro de uno de los grupos pop más conocidos de Irlanda en los años noventa, supondrá una motivación para Helen y hará que se esfuerce por escapar de la depresión que amenaza con derrumbar nuevamente su vida.
Helen no puede dormir ha sido para mí un libro que ha ido de más a menos. El principio me gustó y me pareció original introducir una investigación dentro del argumento, es algo que hasta ahora no había encontrado en un libro de este género y por eso me pareció diferente. Sin embargo a medida que pasaba páginas me daba la sensación de que la historia giraba una y otra vez sobre lo mismo, por lo que aunque ha sido una lectura entretenida, no es un libro que haya disfrutado totalmente.
Marian Keyes |
El libro está narrado con un estilo fresco y desenfadado, empleando la autora un lenguaje directo y claro que hace que se lea con facilidad y agilidad. Es una lectura amena pero en general tiene un tono más serio que el que suele caracterizar a este tipo de libros en los que aunque se recojan situaciones con mayor o menor carga dramática, siempre van acompañadas de ciertas dosis de humor.
Helen es un personaje cuya personalidad viene marcada por sus problemas de salud mental. Este es uno de los puntos importantes que tiene la novela y a través de ella nos acercamos a la situación en la que se encuentran las personas que atraviesan por estados depresivos, observando la lucha que mantiene constantemente para salir adelante. Es un tema que está tratado con realismo, sin restarle importancia a través del humor a pesar de que Helen, por su carácter, sea una mujer un tanto alocada. Comparte con el lector sus pensamientos y emociones al narrar en primera persona y así nos permite ver cómo se siente, lo que pasa por su mente en cada momento y los esfuerzos que hace para no dejarse vencer por la depresión. Si bien la conocemos en un punto concreto de su vida, paulatinamente y a través de sus propios recuerdos sobre momentos de su pasado vamos viendo lo que ha ocurrido durante los últimos años y así se va construyendo su carácter, observando la evolución que ha seguido a lo largo del tiempo. Es un personaje que me ha gustado, no pierde su sentido del humor y tiene una personalidad carismática que la hace destacar.
El resto de personajes no están demasiado desarrollados y solamente los que tienen un contacto más directo y cercano con Helen adquieren mayor protagonismo, destacando así su exnovio o su actual pareja, aunque la mayoría vienen definidos por unas personalidades un poco extravagantes que dan pie a situaciones un tanto cómicas e inusuales. Aparecen también puntualmente algunas de sus hermanas o su madre, a quienes los lectores que hayan leído sus anteriores novelas ya conocerán, aunque la autora se encarga de dar algunos datos para aquellos que tienen su primer contacto con la familia Walsh a través de esta novela.
Os comentaba que la trama de Helen no puede dormir se asienta en buena parte en la investigación de una desaparición y por eso desde el principio se genera un cierto misterio e incertidumbre por desvelar el paradero de Wayne. Sin embargo no es una investigación al estilo policíaco sino que en este caso es todo mucho más sencillo y al menos para mí, Helen se limita a dar vueltas sobre lo mismo por lo que llega un punto en el que al no avanzar nada, este tema se estanca y la historia pierde interés, de ahí que os dijese que iba de más a menos. Esto puede ser debido a que el enfoque que Marian Keyes le ha dado a su novela se basa en el personaje de Helen y de ahí que su trabajo quede en un segundo plano y la investigación se desarrolle lentamente, con escasas pistas y giros argumentales. No obstante he de señalar que a mí me mantuvo intrigada hasta el final, no había deducido qué podía haber ocurrido con Wayne.
Resumiendo, a pesar de que Marian Keyes es una autora vinculada al chick lit, en este caso nos presenta una obra que se aleja un tanto de lo que es habitual en este género combinando el suspense que envuelve a la investigación con la situación personal de su protagonista. Una novela que aborda el tema de la depresión y cuya lectura resulta entretenida, recomendable para todo tipo de lectores por la combinación de elementos que encontramos en su trama.